Pasado el primer trimestre los vómitos disminuyeron, las nauseas seguían presentes pero con menos intensidad, y el cansancio ya no era tan profundo, al menos podía ponerme en pie y salir a la calle. Por unas semanas parecía que todo volvía a la normalidad y empezaría a disfrutar del embarazo, pero el bienestar duro poco, apenas pude disfrutar tres semanas. Sinceramente lo más duro de todo esto es que no te puedes casi ni permitir el descanso que tu cuerpo necesita, recuerdo que había días en los que no podía ni levantarme del sofá, solo quería dormir, estar tumbada por que al levantarme me mareaba y automáticamente tenía que ir a vomitar. Todo ese tiempo no dijimos nada del embarazo, por el tema del sangrado y el alto riesgo de aborto que pasamos, lo que menos quería era preocupar a mi familia y mucho menos tener que dar explicaciones después si pasaba algo malo. Así que por ese tiempo intenté esquivar cualquier tipo de encuentro, reunión familiar o salida.
Resumiendo un poco, en este segundo trimestre tras la pausa agradable que me concedió mi cuerpo, volvió el cansancio, las nauseas, algún que otro vomito y lo peor de todo, la pesadez de las piernas, los sofocos, la acidez, los pinchazos en la zona de los ovarios y mi más temido dolor, el del cólico nefrítico. En mi segundo embarazo me tuvieron que ingresar, saqué nada más y nada menos que seis piedras, tenéis post + foto en mi perfil de instagram. Aquel dolor es el peor que he sentido en mi vida, mucho mas doloroso que dar a luz y eso que mi primer parto fue muy traumático y doloroso.
El único tratamiento que puedo tomar por ahora para el cólico es Paracetamol. Además, beber mucha agua en pequeñas cantidades ayuda a facilitar el paso del cálculo o piedra, aplicar calor en la zona dolorida y caminar lo que sea posible también son otras formas de aliviar el cólico. Si el dolor aumenta a fase aguda debería de acudir al hospital de inmediato, entonces si me suministrarían antibióticos y analgésicos varios. Tengo días en los que apenas puedo moverme, pero de momento voy haciendo así que espero no tener que acudir a urgencias por que realmente se pasa fatal estando ingresada, embarazada y con los peques que solo quieren estar con mamá en casa.
De las pruebas que me hiceron, la analítica salió dentro de lo normal, lo único que me detectaron fue baja reserva de hierro, así que me mandaron unas vitaminas nuevas por que las anteriores me sentaban mal. Y el análisis de orina dio positivo, así me detectaron el cólico nefrítico y la infección. Para la infección de orina me recetaron Monurol , un sobre durante dos días y listo.
Esto son algunos de los síntomas físicos que pasé y a día de hoy aún sigo teniendo. Después hemos tenido otros problemas durante el embarazo que os contaré en otro post y video, por que sin duda eso será mejor que lo veáis para que podáis entender el dolor y sufrimiento por el que he tenido que pasar por culpa de unos incompetentes que se hacen llamar profesionales.
Como siempre gracias por leerme.
¡Hasta la próxima! 💛
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